!Oh, Gran Espíritu, cuya voz escucho en los vientos, y cuyo aliento da vida al mundo entero, óyeme! Soy débil, necesito tu fortaleza y sabiduría.
/
Permíteme caminar en belleza, y haz que mis ojos siempre contemplen la roja y purpúrea puesta del sol.
/
Permite que mis manos respeten las cosas que tus has hecho y que mis oídos estén prestos a escuchar tu voz.
/
Hazme sabio para que yo pueda entender las cosas que tu has enseñado a mi pueblo. Ayúdame a aprender las lecciones que tú has escondido en cada hoja y en cada roca.
/
Permíteme caminar en belleza, y haz que mis ojos siempre contemplen la roja y purpúrea puesta del sol.
/
Permite que mis manos respeten las cosas que tus has hecho y que mis oídos estén prestos a escuchar tu voz.
/
Hazme sabio para que yo pueda entender las cosas que tu has enseñado a mi pueblo. Ayúdame a aprender las lecciones que tú has escondido en cada hoja y en cada roca.
/
Busco fortaleza, no para ser mayor que mi hermano, sino para luchar contra mi más grande enemigo, que soy yo mismo.
/
Permíteme que esté siempre listo para allegarme a ti con manos limpias y ojos rectos.
/
Así, cuando la vida se desvanezca, como se apaga la puesta de sol, mi espíritu pueda volar a ti sin avergonzarse.
/
Regalo de los niños indios sioux de la Escuela india Nube Roja en Pine Ridge, South Dakota (Estados Unidos).
/
Permíteme que esté siempre listo para allegarme a ti con manos limpias y ojos rectos.
/
Así, cuando la vida se desvanezca, como se apaga la puesta de sol, mi espíritu pueda volar a ti sin avergonzarse.
/
Regalo de los niños indios sioux de la Escuela india Nube Roja en Pine Ridge, South Dakota (Estados Unidos).
No hay comentarios:
Publicar un comentario